Un equipo de científicos chinos descifró la ruta biosintética del paclitaxel, un fármaco anticancerígeno de gran importancia, y logró replicarla en plantas de tabaco, ofreciendo una esperanza para la producción sostenible de este fármaco.
El paclitaxel, también conocido bajo su nombre comercial Taxol, es un compuesto natural extraído del tejo del Pacífico, un árbol en peligro de extinción al nivel de los osos panda en China. Su compleja estructura química dificulta su obtención por métodos tradicionales, lo que obliga a la tala de grandes cantidades de estos árboles centenarios para tratar a pacientes con cáncer de mama, ovario y pulmón.
Una planta de tejo del Pacífico crece muy lentamente, tardando generalmente décadas o incluso cientos de años en convertirse en un árbol grande. Además, los niveles de contenido de sustancias similares al paclitaxel en las plantas del Taxus brevifolia son extremadamente bajos.
Sin embargo, la investigación liderada por los profesores Yan Jianbin y Lei Xiaoguang del Instituto de Genómica Agrícola de Shenzhen y la Universidad de Pekín, respectivamente, ha abierto una nueva vía para la producción de paclitaxel.
Mediante técnicas de ingeniería genética, los científicos lograron identificar y aislar las enzimas clave involucradas en la biosíntesis del precursor del paclitaxel, un compuesto llamado bacatina III.
El estudio, publicado en la revista Science, detalla que la ruta biosintética lograda en el tabaco es más eficiente que la existente en el tejo, requiriendo menos enzimas y ofreciendo un mayor rendimiento. "Intentamos coexpresar los dos nuevos genes con otros genes conocidos involucrados para determinar si podemos reconstruir artificialmente la vía de biosíntesis en tabaco", dijo Yan.
Los científicos descubrieron que solo nueve enzimas, en lugar de las 13 previamente estimadas, eran necesarias para el proceso. "Este hallazgo es un avance significativo en la comprensión de la biosíntesis de productos naturales complejos", afirmó el profesor Jens Nielsen, de la Universidad Tecnológica de Chalmers en Suecia, y agregó: "Permitirá la producción de otros medicamentos valiosos a gran escala y el desarrollo de nuevos fármacos".
Esto podría permitir la producción sostenible de paclitaxel a gran escala, reduciendo la presión sobre los árboles en peligro de extinción y abaratando el costo del medicamento. Los investigadores chinos aún deben superar algunos desafíos técnicos para lograr la producción comercial de paclitaxel a partir del tabaco.
Fuente: Infobae