La Food and Drug Administration de los Estados Unidos (FDA) aprobó una versión genérica del medicamento GLP-1 inyectable diario liraglutida para personas con diabetes tipo 2, lo que abre la puerta para que opciones de menor precio lleguen al mercado y ayuden a abordar la escasez.
La liraglutida, que se comercializa bajo la marca Victoza para la diabetes, es una versión anterior de la misma clase que la semaglutida, el ingrediente activo de Ozempic. Ambos medicamentos son comercializados por el gigante farmacéutico danés Novo Nordisk.
El genérico liraglutide es vendido por Hikma Pharmaceuticals USA y un portavoz le dijo a CNN por correo electrónico que la compañía espera que el medicamento esté disponible en todo el país antes de fin de año. La compañía no reveló el precio planificado del genérico, y solo señaló que “costará menos que el Victoza de marca”.
El medicamento de marca cuesta entre US$ 500 y US$ 815 por paquete, dependiendo de la dosis, antes de descuentos o seguros, según Novo Nordisk, que también vende una versión de liraglutida aprobada para la obesidad, llamada Saxenda.
Sin embargo, los medicamentos GLP-1 más nuevos, que se administran como inyecciones semanales en lugar de diarias, han mostrado mayores beneficios, especialmente para pacientes con obesidad y aún no están disponibles como genéricos.
Entre ellos se encuentran Ozempic y su fármaco hermano aprobado para la obesidad, Wegovy, que utiliza semaglutida y Mounjaro y Zepbound, para la diabetes y la obesidad, respectivamente, que utilizan el ingrediente activo tirzepatida. Pueden costar US$ 1.000 al mes o más sin seguro ni descuentos.
Teva Pharmaceuticals, otro fabricante de medicamentos genéricos, presentó una versión genérica autorizada de liraglutida en junio en Estados Unidos, en virtud de un acuerdo de conciliación alcanzado con Novo Nordisk en 2019. El genérico autorizado es fabricado por Novo Nordisk y distribuido y vendido por Teva.
Según la FDA, un medicamento genérico autorizado es diferente de un medicamento genérico porque es “exactamente el mismo medicamento” que un medicamento de marca, solo que sin el nombre de marca en la etiqueta. Un medicamento genérico, como el genérico de liraglutida, es una copia de un medicamento de marca desarrollado y fabricado por otra empresa.
Los genéricos también son diferentes de los medicamentos compuestos, que son versiones elaboradas por farmacias y permitidas cuando hay escasez de medicamentos. Las versiones compuestas, en particular de semaglutida y tirzepatida, inundaron el mercado cuando esos medicamentos escasearon en los últimos años, aunque la escasez de tirzepatida acaba de declararse resuelta. La agencia advierte que las versiones compuestas no están reguladas tan de cerca como los medicamentos genéricos y de marca.
Fuente: FDA