Los medicamentos genéricos promueven la sostenibilidad de los sistemas nacionales de salud y se enfocan en garantizar el acceso universal de los tratamientos médicos.

Estos tienen la misma composición y cantidad de principios y activos que los medicamentos a los que hacen referencia, es decir, no hay diferencia en su compuesto y tampoco en su efectividad.

Las diferencias que se podrían encontrar entre un medicamento genérico y uno "original" residen en su apariencia, color, tamaño, forma, sabor o excipientes (aquellas sustancias para conseguir la forma deseada y que facilite la preparación y concentración del mismo).

Que un medicamento sea genérico, no quiere decir que sea de menor calidad, solo significa que se comercializa bajo el nombre de su principio activo en lugar de bajo el nombre de la marca; ibuprofeno, nimesulida, antistamínico o paracetamol, entre otros.

Las medicinas genéricas existen gracias a que caducan las patentes de las marcas; su elaboración es la misma y los procedimientos de elaboración son vigilados y aprobados por las autoridades gubernamentales del área de salud. Una de sus principales ventajas principales es que el precio se reduce hasta un 60 por ciento en comparación a las marcas originales.

Los genéricos pasan por las mismas pruebas de control y sanidad que cualquier otro medicamento asegurándote los mismos resultados.

Existe una prueba llamada ‘bioequivalencia’ que es la que experimenta y determina que el genérico sea equivalente en calidad al medicamento original.

No en todos los países está autorizada su producción y venta, pero afortunadamente en Argentina sí. Los países donde más se consumen son España y Estados Unidos.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) aconseja que leas el envase para asegurarte de que contenga el mismo principio activo de la marca a la que hace referencia.

Algunos consideran que una de las mayores desventajas de estos productos es que son elaborados por múltiples laboratorios y que esto puede causar confusión en los pacientes debido a que los envases y presentaciones son diferentes.

Muchas otras personas creen que el precio está directamente relacionado con la calidad y eso los lleva a desconfiar del producto.